INGREDIENTES

450 gramos de harina de fuerza
1 cuadradito de levadura fresca
260 ml de leche templada (yo desnatada)
90 gramos de azúcar (yo de caña integral)
7 gramos de sal
80 gramos de mantequilla
1 huevo tamaño L
Ralladura de 1/2 naranja

Para el relleno

115 gramos de azúcar de caña integral
Canela en polvo

PREPARACIÓN:

En un recipiente amplio, echamos la leche tibia y deshacemos la levadura. A continuación, añadimos el azúcar, la mantequilla a temperatura ambiente, la sal, el huevo batido y la ralladura de naranja. Removemos todo bien con las varillas. Por último, añadimos la harina tamizada, poco a poco, removiendo todos los ingredientes para que queden bien integrados.

Formamos una bola de masa, la colocamos en un cuenco amplio, tapamos con plástico film y dejamos que leve hasta llegar al doble de su tamaño por lo menos.

Sacamos la masa y sobre una superficie enharinada estiramos con un rodillo, hasta que quede un rectángulo de un grosor de 1,5 cm aprox. Espolvoreamos por encima con la mezcla de azúcar y canela en polvo, que quede bien cubierto y enrollamos como si fuera un brazo de gitano. Entonces, cortamos por la mitad, quedando dos porciones que quedarán con la forma típica de estos rollitos.

Los colocamos, uno paralelo al otro, en un molde tipo plum cake, yo prefiero de silicona. Yo coloqué el molde en el horno a 50ºC y la masa llegó hasta arriba del bowl, mucho más rápido que si leva de forma natural (sin utilizar el horno).
Entonces ya podemos pintar la superficie con mucho cuidado, con un pincel de silicona, untado en leche y dejamos en el horno con calor arriba y abajo a 180ºC durante unos 25-30 minutos, hasta que quede un poco doradito.
El corte es precioso y además está delicioso 🙂

Dejar un comentario